Interrogante permanente

Todo es como correr sin saber el destino, ya me cansé de quererte, me abrazas hoy con más fuerza, me ves de manera diferente, y no me sueltas con tus brazos ni con tu mirada y yo me pregunto ¿qué quieres? Me pregunto si hablas mi mismo idioma porque ya te he explicado que si vienes para irte al día siguiente mejor no vuelvas…maldita fuerza en mi de la que no me puedo liberar, es como si tuviéramos dos imanes en nuestros cuerpos que los atraen y nos hacen caer de nuevo…la definición de amor en la que intervenga yo no está en tu diccionario entonces si así es, aunque mis dedos se nieguen a escribirlo, pasa la página hasta encontrar algo que tenga sentido, para mí siempre lo tuviste pero ya he aprendido que mi corazón no es igual correspondido, pero es como un niño necio que quiere seguir jugando bajo la lluvia y se va enfermar y ya no sé si lo pueda curar más, nunca me diste la medicina y a mí ya se me va a acabar…a veces quisiera tomarte de la mano y saltar al océano contigo, y naufragar solos los dos y vivir en medio de la naturaleza, sin negar nuestra naturaleza que es ese instinto insistente que no se cansa de gritar que nos necesitamos, que siempre lo que buscábamos estaba frente a nuestros ojos en ese lugar por el que ya habíamos pasado…pero a ti no te gustó, a mi me lastimó, y el miedo nubló el panorama de tentaciones y el amor voló tan alto que ya lo perdimos de vista…pero somos felices, sonreímos al mundo y no dejamos que nos oprima solo que las preguntas me persiguen y no han encontrado otro tema que no seas “tú”, que no sea “nosotros”, que no sea “¿qué pasó?” ayer…hoy…mañana espero que sea mejor…necesito que los temas de mi memoria encuentren otra ilusión, que ya no quiero verte y extrañarte, sentirte y emocionarme y por una razón que se perdió no querer soltarte…interrogante permanente que me mantiene alerta pero a veces baja la guardia y voy de vuelta..